“En Europa ya no me hago ilusiones”

El presidente del Eurogrupo: “En Europa ya no me hago ilusiones”. Así finalizó la enésima reunión de prebostes de UE para no llegar a nada.

Rectifico, para llegar a donde llegan siempre, que esto no funciona para la inmensa mayoría pero mientras funcione para los ricos hay que mantenerlo, a costa de la propia vida , de los demás, claro está.

Pero en medio de las tinieblas alguien atina y enciende una linternita. Menudo peligro se corre, aunque la luz sea poca, si enciendes en medio de la oscuridad deseada y trabajada por el poder, para que no sepamos a donde vamos.

La luz, la enciende el presidente del Eurogrupo con esa frase que significa la capitulación ante una realidad que solo se esconde pero que es tan real como que la tierra da vueltas.

Quizás haya que mirar a la historia para comprender que primero hay que cambiar a las personas y después el mundo y esta "nueva Europa" que pretendíamos construir se ha hecho al revés. Europa a lo largo de la historia no ha sido mas que una entidad geográfica, nunca ha sido nada más, desde el "homo sapiens" hasta hoy. Lo que nos ocurre ahora es que como cada día somos mas lerdos, pues casi que nos lo habíamos creído. Desde la frontera occidental de Rusia al Atlántico, los europeos, lo mas que hemos conseguido en la historia ha sido pasar temporadas sin matarnos literalmente en el campo de batalla, pero hay tal diferencia entre un alemán y un portugués; un holandés y un griego o un finlandés y un español, que tratar de hacer causa común y entre todos es una pura entelequia.

Mientras los hilos del poder, el de verdad, han visto campo para sacarnos las entrañas, nos han vendido el "pegoleto" de que todos estábamos en una misma comunidad de intereses y basada en la solidaridad.

Nada más lejos de la realidad cuando ahora descubrimos que el dinero que unos prestaron a otros era para que los primeros se lo gastaran en las empresas y comercios de los primeros, que los fondos que se ponían eran para mantener a buen tren la maquinaria de los primeros mientras se les vendía un "todos somos iguales" a los segundos. ¿Es que no había analistas en en la Eurozona para ver que los griegos. los irlandeses , los portugueses, españoles , etc. "estábamos viviendo por encima de nuestras posibilidades"?. Pero mientras las grandes empresas de Alemania, Francia, etc.. se llenaban los bolsillos con el dinero que los bancos daban a los ciudadanos, aunque fuese sin la mas mínimas garantías....mientras eso ocurrió aquí todo el mundo miró al tendido.

Pues igual que fuimos embaucados por todos esos poderosos y sus secuaces, asi nos están engañando ahora diciendo que van a resolver problemas cuando lo que están haciendo es más de lo mismo. Alemania y otros disponen de cuanto efectivo quieren a costo casi cero, mientras a otros se les niega por decreto de sus "vendidos" gobiernos, el pan y la sal.

Igual dentro de algunas años, si esto no ha explotado en una espiral de violencia para que la que cada día los gobernantes echan mas leña, nos encontramos con algún lumbrera que descubre , tarde como siempre, que Alemania, Holanda y no se cuantos otros... nos engañaron "por encima de sus posibilidades" y habría que haber....Y digo yo, ¿donde estaba la Sra. Merkel cuando Alemania daba créditos a Gracias para que compraran armamento?

Y mientras la locomotora ya no es capaz de tirar para adelante, uno de los vagones de cola, nuestro Gobierno, sale a la palestra convenciéndonos que un año después de llegar al poder, todo empieza a mejorar... será para ellos, digo yo. Vergüenza le debía dar, si supieran lo que es, a la Sra. Santamaría de decir que se aprecian avancen, digo yo que será ¿en su casa?. Que la reforma laboral empieza a funcionar ¿será en Kazaquistan?... Con dos millones de trabajadores públicos sin paga de navidad, con 6.000.000 de parados y con el resto con "el rabo entre las patas" aterrorizados por las que nos puede caer aún, si alguien espera que repunte la economía en el próximo trimestre solo se puede achacar a una de estas dos cosas: ser tonto de remate (lo menos probable) o haber llegado a la conclusión de que los tontos de remates somos todos los demás.