El presentador de un telediario, hace unos días, pregunta al corresponsal en Berlín si la dimisión de la Ministra de Educación afectará negativamente a la Sra. Merkel de cara a las elecciones. Respuesta: lo que le habría afectado es que no dimitiera. ¿Qué raro son los alemanes, verdad?.
Lo peor de ésto es que así de raro son los ingleses, los austriacos, los holandeses, los suecos..., en fin, que menos mal que existe nuestro país para demostrar que "no todos somos iguales".
Una Ministra tan poco elocuente, ágil y preparada, para llevar un ministerio como el de Sanidad, se lía hasta desmintiendo las acusaciones de "vivir de la corrupción" y no tienen claro si está separada, divorciada o "espantá" y por eso dice no sorprenderse que su marido o ex o lo que sea, llegue a casa con un Jaguar. ¿A quién le va sorprender en su garaje un Jaguar más o menos?
Pues ni dimite y es más, su jefe la apoya, dice que es maravillosa y que además lo está haciendo muy bien. Hasta ahi lo entiendo, con lo mal que lo hace el gobierno, ella no desentona.
Lo grave, diría yo gravísimo, no es esto que en cualquier lugar del mundo sería un escandalazo, lo peor es que el Sr. Rajoy, los suyos, los otros, los de antes y ... a este paso, lo remediamos, o también los siguientes, están todo bajo sospecha, cuando no acusados con todas las pruebas en contra.
El Tribunal Supremo dice que el Tribunal de Cuantas está manipulado. En el caso de mayor corrupción conocido en este país y parte del universo, solo hay un condenado, el juez. El Sr. Rajoy se subió el sueldo cuando pedía a voces moderación salarial, un 30% nada más. El PP ganó hasta 10.000.000 anuales cuando este país empezaba a hacer aguas y no poca.¿Como gana un partido político 10.000.000 en un año? ¿Si necesitan estar subvencionados por todos nosotros, porque no devuelven lo que no gastaron? ¿Que venden y a que precio?.
Solo algo así es impropio de una clase política y un sistema DECENTE, huele a podrido antes de de abrirlo.
Sin embargo, estos mismos indecentes, dicen que un millón de firmas para modificar la ley hipotecaria no son suficientes. ¿Asesinos? se queda corta señora Colau. Psicópatas, embrutecidos a fuerzas de creerse libre de toda responsabilidad, de haberles dejado campar a sus respetos cual animales asilvestrados.
Su desvergüenza, su prepotencia, su cara dura... casi nos ha convertido no en un país con deuda catalogada de "bono basura", mucho peor, somos un "país basura".
"Lo que pasa en España es más grave de lo que parece. No se trata de un
escándalo de corrupción, ni de dos, ni de tres, ya no. Estamos ante el
fin de una época, el desmoronamiento de un Estado, una crisis tan honda
que desborda todas las cifras", Almudena Grandes , El País 11 de febrero.
Hemos dejado y seguimos dejando que nos expropien hasta de la razón, que roben sin cautela, que tapen delitos que ponen los vellos de puntas, que amparen a los ladrones, a los sinvergüenzas y hasta se permitan hacer leyes para pintar de blanco las almas mas negras; amnistía fiscal (que yo y la inmensa mayoría no necesitamos) , indultos a quien les place o tienen que agradar, etc..
Mientras, millones de inocentes sin nada que llevarse al estómago mas que la caridad, varias decenas de miles que ya no tienen ni donde cobijarse, pero eso sí, cambiar la ley hipotecaria no porque perjudica a los bancos, que por cierto, son nuestros bancos, mas NUESTROS , que nunca porque hasta las juergas de los directivos hemos pagado y para mas inri hasta hemos ayudado a llenar sus cuentas en ... da igual, en cualquier sitio de esos donde las esconden.
Barcenas no es un delincuente, es el prototipo de triunfador en un país gobernado de arriba a bajo por corruptos.
Lo que sobran son derechos, funcionarios, pensionistas, enfermos. estudiantes... claro que sobran, los políticos corruptos ocupan mucho sitio y en este país casi todos , casi , casi , casi... todos, los son.
Acabo de enterarme antes de publicar esto que el Papa anuncia su dimisión . Seguro estoy de que es mas capaz y tiene menos motivos para dejar tan alta dignidad que cualquiera de nuestros miserables políticos
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